Diario del que nada tiene que decir:
Que se escribe solo al llorar y nadie escuchar
Que se dictan las palabras que no se atreve el alma a contar
Deleitamos el ego con lo que nosotros escondemos
Ante los ojos del que delante boquiabierto nos mira
Nos sentimos importantes al cerrar el candado que separa
La verdad de la fantasia de nuestras vidas
Creemos que somos alguien
por tener algo escondido dentro o en papel
Pero cuando alguien astuto ser
Descubre las ideas y pensamientos
Que se esconden en el alma, del narrador
De una historia verdadera, que a veces
No tiene final pero si desenlace.
Que ocurre si morimos a media hoja de diario
Quien acabara de contarlo
Que será escrito Prosa o verso
O será que quiza nadie encontrara
las hojas del sentimiento
Y se dejara perder el recuerdo
De ese ser que al leer el texto
Vemos que no era tan querido
Pues ciertamente descubrimos
Que nos mentía cuando nos daba ese beso
Que engañaba cuando hablaba de nosotros
El por que yo lo diré
Siempre mentimos incluso cuando nos auto escribimos.
Pensamientos en mil hojas escritos en dias enteros
Gastados para empuñar el alma, arma de doble filo,
que es La pluma
al escribir mortífera, pues al escribir el sentimiento
Queda marcada en la hoja la semilla del odio, del amor o incluso
Del caos enfermizo que atrajo al ser a plasmar su alma
En viejas hojas amarilleadas por el tiempo.
Dos horas despues de rebuscar en los enredados núcleos del cerebro
Encuentro las palabras exactas para poder expresar
Con claridad, que entiendan los ciegos, sordos
E incluso algún mudo extranjero
A los sentidos de un disentido
Cuando las palabras las lee alguien que ha sufrido lo mismo
Que ha vivido el camino parecido al narrado
Cree que se habla de si mismo en el texto desconocido.
Pensemos que estupidez escribir lo sentido para que nadie lo pueda leer
, demos a leer el alma mientras les hablamos al oido,
y veremos como nos entendemos razas hombres y muertes.
"Frantic Mind"
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